jueves, 15 de mayo de 2008

Relato 2. El dia que me morí de la risa...


Hola damnificad@s. hoy dedicaré el post a relataros un dia inolvidable de vuelo junto con mi pariento, que sin duda podreis tomar como vuestro, porque a todos nos ha pasado.


Resulta que hará un año, aprovechando que venia el buen tiempo, mi pariento me engaño vilmente para salir al campo y tener una experiencia bucólico-pastoril un dia de primavera. Aunque en el fondo sabia que se llevaria el avion, con toda seguridad, conservé la esperanza de poder guardar para la intimidad algunos momentos magicos...


Pues bien, nada mas llegar al sitio, despues de comer, sin consultar a ver que me parecia, me llevó a una explanada inmensa, una especie de altiplano entre montañas donde no se reunian precisamente las mejores condiciones para volar. Hacia bastante "viento" y además racheado(él siempre dice "aire", parece mentira que tenga que corregir a un aeromodelista este tipo de cosas), y además el terreno no contaba con la vegetación mudillita de su campo de vuelo habitual. Aún asi no podia aguantarse más y sacó toda la parafernalia del coche;


En un par de minutos lo tenia todo preparado, baterias cargadas, avion seminuevo (tan solo 2 vuelos), transmisor al cuello, sonrisa en la boca y dirección mas o menos estable del viento localizada.


Yo me apoye en el coche, pensando en la revista que me había comprado, pero por no hacerle un desprecio, me quedé para verlo volar al principio, y con la excusa de que estaba empezando a refrescar, meterme de cabeza a lo mio al cabo de unos minutos y dejar que él se desfogara hasta desintegrar el avion.


Pues bien, lanzó el avión y aquello empezo a subir y subir, cada vez con una inclinación mayor, hasta que al final, no se todavia como, dió un quiebro muy brusco y bajó incluso mas rapido, pero en picado. El final estaba anunciado... aquello petó por 500 sitios, con lo nuevecito que estaba (solo tenia 2 capas de cinta aislante, cuando lo normal son 5 ó 6)!!!


todo esto paso en menos de un minuto. Miré a mi pariento. Estaba blanco, pero con esa expresion de ¿Comooooor?...amos que si le pincho el brazo no sale sangre... y me entraron unas ganas imperiosas de reirme de su desgracia, pero por respeto intenté contenerme, ya sabeis , eso de que te pones roja como un tomate, y al ver que no resistia mas, me alejé del sitio mientras él iba a por el siniestro total, para reirime como nunca...
Al volver él, me sentia mezquina, (lo se, no puedo evitar reirme de alguien que se cae aunque se haga daño y me siento fatal, pero es superior a mi), e intenté guardar las formas, pero al ver su cara de panoli desgraciao otra vez me vino otro ataque de risa incontenible que esta vez no pude remediar...
aquello me costó toda una tarde de lo sientos y perdonamés, aunque no os mentiria que de camino a casa se me saltaban las lagrimitas de risa, y tenia que mirar a la ventanilla para aguantarme (aun asi, me reí de su desgracia como 3 ó 4 veces de camino)
Todavia hoy , mientras lo escribo, me duele la cara de reirme.
Menos mal que todo aeromodelista que se precie es un poco macgiver y arregló con 5 ó 6 metros de cinta americana todo lo que tuvo que arreglar, aunque ya no pudo volar nada porque al dia siguiente se puso a llover...
En fin, una anecdotilla mas para contar...
Porcierto, podiais comentar algo, yo se que hay alguien por ahi que me lee, el contador de visitas no miente!

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